Cómo funcionan las tragaperras

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Uno de los juegos de azar más populares en nuestro país es la máquina tragamonedas, tragaperras o, en inglés, slots. Se pueden encontrar en casi cualquier bar de nuestro territorio, siendo sus sonidos y sus luces algo que nos resulta muy familiar.

En los casinos actuales tienen una presencia importantísima, ya que la posibilidad de hacerlos únicos con distintas ambientaciones y temáticas, gracias a la tecnología, les ha convertido en uno de los juegos preferidos por los aficionados.

La versión online de estos juegos permite disfrutar de una experiencia muy parecida y con el plus de posibilitar efectos audiovisuales de lo más variados.

Algunas de ellas además incluyen intros a modo de mini películas que te narran un poco el contexto en el que se enmarcan o si hay alguna misión que conseguir (las fases especiales donde los premios y los giros se multiplican).

Pero si la versión online de las tragamonedas funciona a base de programación, ¿Cómo funcionan las tragaperras clásicas? Os lo vamos a explicar a continuación.

Cómo funcionan las tragaperras

La explicación sencilla dice que, a través de un mecanismo mecánico o electrónico, se ponen en marcha los rodillos que giran sobre sus ejes y que, al detenerse, dejan en línea una serie de símbolos que pueden formar combinaciones ganadoras.

Todo eso arranca con el desembolso de dinero, generalmente monedas o tickets pre pagados.

Por líneas no nos referimos únicamente a las líneas horizontales en las que se alinean los símbolos (que van separados entre sí en los rodillos de forma equidistante y que se detienen siempre donde existe una línea de pago), sino que pueden ser diagonales cruzando los rodillos de modo que siempre incluyan un símbolo de cada uno de ellos, o incluso en formas que no son exclusivamente líneas rectas (en ángulo, en zigzag…).

El ingenio que hace que los rodillos se pongan en marcha no es más que un motor sometido a un sistema conocido como RNG (Random Number Generator o generador de números aleatorios).

De ese modo, cada vez que le das al play (o accionas la palanca en las más tradicionales), el motor hace girar los rodillos, colocados en paralelo, sobre un eje común (aunque en las máquinas multi-pantalla pueden haber varios grupos de rodillos).

La cuestión es que nunca sabes cuándo se va a detener, y de hecho no se puede saber. Por más que los «trucos» populares entre los asíduos a los salones recreativos y casinos incluían estrategias tales como esperar a que llevara la máquina un tiempo o número de giros determinado sin haber otorgado ningún premio; lo cierto es que se basan en el azar… ¿o no? Esto nos lleva a hablarte de los dos principales tipos de tragaperras que existen.

 

Tipos de tragaperras

Existen dos modalidades de tragaperras según su funcionamiento (aunque con otros criterios podríamos establecer categorías múltiples).

De azar: aquí el giro y su detención son totalmente aleatorios.

Dependientes de un programa interno que establece que, pasado un número determinado de giros, rondas o jugadas, tiene que necesariamente dar un premio al jugador.

Se establece además que ha de ser un montante concreto que es un porcentaje generalmente de lo que se ha ido invirtiendo en la misma. Estos generadores están constantemente elaborando secuencias de números aleatorios, una cantidad de cientos o quizá miles por segundo.

Cuando le das a Play o Girar en una máquina se utilizará el número que se acaba de determinar para establecer cuántos giros se realizarán por los rodillos.

La calidad de la programación determinará que no se pueda predecir por los jugadores cuándo se iniciará la secuencia de números de nuevo.

Las segundas son las más habituales (hoy en día es muy difícil encontrar máquinas puramente mecánicas, ya que los microprocesadores son fáciles de programar y su fiabilidad permite que se conozca de antemano el porcentaje de retorno del jugador.

Según su mecánica también podemos dividirlos en dos grupos distintos:

Tragaperras clásicas: las que conservan los rodillos físicos, girando y ofreciendo premios.

Vídeo tragamonedas: las que sustituyen rodillos y en ocasiones también botones y cuadros informativos por animaciones en pantallas de vídeo. No nos referimos necesariamente a las slots online, ya que en casinos y salones físicos es posible encontrar vídeo tragamonedas.

 

Vocabulario y partes de las tragaperras

Gran parte del vocabulario que rodea tanto las funciones como las partes de las tragaperras nos ha llegado en inglés, por lo que vamos a intentar hacer una lista que nos ayude a conocer aquello que es más importante:

Bonus: con esta palabra verás que se hace referencia frecuentemente a alguna característica especial o fase especial del juego.

Fase de bono sería el equivalente en castellano y hace referencia a momentos del juego que se alcanzan generalmente por haber obtenido una combinación determinada de símbolos. En estas fases los premios son de mayor importancia o se obtienen posibilidades gratuitas de seguir jugando gracias a los giros gratuitos.

Ranura: parte por la que se introduce el ticket o moneda que posibilita el juego.

Medidor de crédito: pantalla o lugar de la pantalla donde al jugador se le muestra de cuánto crédito o monedas dispone para seguir jugando.

Drop Box: bandeja en la que se depositan las monedas que la máquina expide, ya sea por premio ganado o por devolución.

Spin, Free Spin: Spin significa giro, es equivalente a ordenarle a la máquina que ponga en funcionamiento su mecanismo. Si hablamos de Free Spins estamos hablando de giros o partidas gratuitas, generalmente conseguidas tras la obtención de una combinación de símbolos concreta.

Línea de pago: cada una de las líneas (rectas o no) que, uniendo diferentes partes de los rodillos en las que se encuentran los símbolos, permiten seguir una combinación concreta de los mismos.

Los premios se pagan en función de que una combinación aparezca en una línea de pago. Tienen distintas formas y modos de lectura (de derecha a izquierda, ambas o viceversa) y pueden ser optativas o fijas.

En las optativas el jugador decide con cuántas líneas juega, incrementando su apuesta en la medida en que el número de líneas crece.

Rodillos: Los rodillos o tambores son ruedas que, colocadas en grupo en paralelo sobre un mismo eje, contienen los símbolos objeto de combinación. Entre símbolo y símbolo hay ranuras o espacios.

Símbolo Wild: se trata de un símbolo que hace las veces de comodín, posibilitando su sustitución por cualquier otro que posibilite obtener un premio (generalmente el mayor posible).

Símbolo Scatter: símbolo que generalmente es requerido en un número igual o mayor que dos y que no han de aparecer combinados necesariamente en la misma línea de pago. Ofrecen al jugador la posiblidad de obtener giros gratis (Free Spins).

Paytable: tabla que contiene una a una las combinaciones ganadoras y sus premios correspondiente.

Beneficio para el jugador (RTP): porcentaje del dinero recaudado por la máquina o casa de juegos que se devuelve a los jugadores. Generalmente se calcula conforme a una cantidad apostada.

Se suele expresar en porcentaje, entendiendo que de cada diez créditos (euros, por ejemplo) un porcentaje X se espera que sea devuelto al jugador o jugadores.

En la actualidad, las slots online copian este funcionamiento pero simplemente -tal y como ya han hecho antes las vídeo tragamonedas que se pueden encontrar en salones recreativos- plasmando los distintos elementos y comandos en una pantalla de juego.

El software desarrollado para ellas permite conectar los créditos que el jugador posee en un determinado casino online, dándole acceso desde el propio juego al «cajero» o lugar donde se deposita el dinero.

Además la ventaja de las tragamonedas online aumenta cuando suma al propio juego la posibilidad de estar conectado a un chat con más jugadores, o el acceso inmediato al servicio de atención al cliente o las reglas del juego ante cualquier duda que le pudiera surgir.

Se trata de uno de los juegos más populares que existen dentro del catálogo de juegos de los casinos online y existen muchísimos títulos disponibles, cada uno con su temática y características previas dentro de un modo de funcionamiento común.