El sonido de la ruleta al girar nos es familiar a todos, así como el típico «no va más» pronunciado por el crupier y el tapete con todas las apuestas colocadas, pero ¿sabes cómo funciona una ruleta? Nos referimos a la física, claro está.
El funcionamiento de la ruleta online te lo explicamos aquí, además con las especificaciones de dos de sus versiones más populares, la americana y la francesa.
Si buscamos un poco de contexto histórico, tenemos noticia de algo parecido a la actual ruleta documentado en la Edad Media. En aquel momento era llamada la Rueda de la Fortuna.
Además, las ruletas o ruedas están muy ligadas a creencias místicas o mágicas, probablemente debido a lo inesperado del resultado, en el que sin duda mujeres y hombres de otra época querían leer vaticinios como si de un oráculo se tratara.
Pero el dato más sorprendente quizá sea la vinculación de su creación, en la versión que hoy día conocemos, al matemático Blaise Pascal.
Su contribución a la creación de las modernas calculadoras nos hace pensar que es perfectamente posible que perfeccionara este entretenimiento, tanto como para que la actual haya heredado muchas de las características de la de Pascal, aún siendo esta del S. XVII.
El juego italiano del Biribi y esta primitiva ruleta seguramente fueron el germen de la ruleta actual, cuyo despegue definitivo tuvo lugar en Paris en el S. XVIII.
Con versiones posteriores que introducían pequeñas modificaciones en Alemania y en Estados Unidos, es a partir de del X. XIX cuando la ruleta se extendió por toda Europa como juego y entretenimiento.
De cualquier modo, el funcionamiento implica un mecanismo bastante sencillo, en el que un disco o rueda con un eje central y una inclinación de su plano (el borde más alto que el centro) se encuentra numerada.
Posee en su borde exterior, el que está elevado, un riel por el que se deja deslizar una bola de pequeño tamaño que acaba, por efecto de la disminución de velocidad, deslizándose por el traste o «rampa» hacia la zona numerada, que también se halla a la misma altura que el centro.
Mientras la bola gira, la ruleta a su vez es impulsada para girar sobre su eje, siempre en dirección contraria la una a la otra. La disminución de velocidad de la bola se debe a un efecto físico que relaciona masa del objeto y velocidad.
Al caer a la zona de los números, bajo cada uno de ellos se encuentra una muesca, celdilla o ranura con leves bordes laterales en las que la bola acaba deteniéndose, señalando una de las cifras.
Los números, además, están colocados de la manera más aleatoria posible, alternando aquellos que pueden reducir todas sus cifras a un número par y los que no. Los primeros están bajo fondo negro y los segundos bajo fondo rojo.
Esta alternancia no es perfecta del todo, ya que el cero (o el doble cero en su caso) también ocupan su lugar y, frente a ellos, el 5 y el diez se encuentran juntos (en este caso el diez es negro y el cinco es rojo.
Hoy en día, las ruletas (o cilindros, como se les ha llamado también), incorporan mecanismos electrónicos que facilitan la identificación del resultado final.
Pero no solo eso, la velocidad de la bola y la propia ruleta está regulado por un pequeño ordenador que se puede probar para demostrar que no se halla modificado para favorecer ningún resultado en concreto.
En las ruletas más automatizadas la bola es lanzada por un pequeño disparo de aire comprimido y la velocidad del motor que impulsa el giro de la ruleta es totalmente aleatoria. Con todo, aún se puede jugar con ruletas totalmente manuales en los mejores casinos.
Si quieres conocer más detalles acerca de la ruleta o necesitas más información, consulta nuestra guía de ruleta y resuleve todas tus dudas acerca del juego y su estrategia.